Opinions HÔTEL JAUME I Andorra La Vella

No está mal situado, pero cuidado con tus pertenencias, porque te pueden "distraer" maquillaje de marca al hacer la limpieza.

No sé ni como empezar, las habitaciones; nosotras éramos 4 y una se encontró una UÑA DE COLOR AZUL dentro de la cama, las mantas estaban todas quemadas, las camas tenían pelos y todo muy sucio. El servicio del hotel; muy malo, pero no por la actitud, sino porque la cena estaba muy mala, dura, con pelos y bichos, pasada no había por donde coger-lo, por otro lado; nosotras pusimos el papel en la puerta de no entrar y ellas entraron y nos hicieron las camas, cosa que no queríamos. Y por último lo único bueno era la ubicación, estaba muy bien ubicado cerca del centro y de caldea.

El hotel es de pena ,una cosa es ser antiguo y otra estar descuidado y sucio, paredes negras de sucias , baño con moho y malos olores, nada mas entrar en la habitación empezó mi alergia debido al polvo , en el colchón algún parásito había porque amanecí llena de picaduras , no volveré jamas , necesita mantenimiento ,renovación y limpieza , recepcionistas muy secas . No lo recomiendo para nada si quieres una estancia agradable

Los colchones parecían viejos pero son cómodos. La habitación tiene un pequeño hall que hace la habitación más grande y donde nuestra hija pudo jugar genial.
El personal de servicio muy bien pero el resto muy muy mal por dejado. Nos han hablado de los hoteles cervol (en booking las fotos dan grimilla) pero dicen que es nuevo i el president nos lo recomendaron una pareja de la zona, i esta justo al lado, así que probaremos ahi para otra vez.
Estábamos en el 5 piso. Olía a viejo i cerrado todo el pasillo ya. Al salir del ascensor sólo una luz tenue, todo el pasillo sin iluminación, daba muy mal rollo. Al entrar en la habitación también olía a viejo, a cerrado, las paredes amarillas de sucias y viejas. Las luces de la habitación les costó encenderse, un interruptor con celo, el grifo del bidet estaba roto i el agua salia hacia arriba. La puerta de la habitación por dentro tenia un agujero parecía un puñetazo. La cuerda para bajar las persiana esta deshilachada i la calefacción un poco alta siendo que a fuera el frío era relativo. Pedimos cambio de habitación porque tengo vertigo y me dijeron que solo les quedaba una en el 3 piso, donde había un grupo (adultos y preadolescentes) que según la recepcionista hacia mucho ruido. Entonces nos quedamos en el 5 piso ( que el realidad no es tan alto por el tipo de edificio). Pero luego pensé que si un grupo no podia respetar las horas de ruido (porque el hotel lo permitía) haber los otros huéspedes como se comportarían. Pero al final en nuestro piso el ruido ha sido casi inexistente hasta que hoy a las 8 de la mañana, se ha puesto a limpiar con alguna maquina en el piso de arriba que es la cafeteria.

Hemos estado 3 días con mi pareja, buen servio amable y servicial, la dueña simpática y servicial, el hotel es antiguo pero una cosa no quita la otra ya que está en buenas condiciones, las habitaciones limpias y acogedoras,con sus utensilios correspondidos, gel de ducha, papel de baño, toallas limpias, shampo, agua caliente, el hotel está bien ubicado cerca del centro, parking cerca, restaurantes y de más, también voy a mencionar el desayuno hay variedad de todo un poquito, creo q para el precio está más que bien mi pareja y yo volveremos.

Hotel viejuno en Andorra la vella cerca del centro. Las habitaciones son viejunas no, lo siguiente. Parecen salidas de una cámara del tiempo al pasado, pero siendo económico respecto al resto, no está mal si la estética no te importa. Pese a ser fin de semana de esquiada, no faltó agua caliente en la ducha, aun estando en la quinta planta.

Por dónde empezar con este intento de "hotel". Fui hace una semana con mi pareja y nos atendió una señora que aparentemente era la dueña del hotel. Qué hablar de ella, una maleducada y grosera que no tiene ninguna habilidad para explicar nada, se puso a discutir con nosotros cuando le reclamábamos una cama doble como habíamos reservado. Ella afirmaba que no tenía y que nos dejásemos de quejar. No fue para nada fructífero y tuvimos que apañárnoslas como pudimos. Luego la comida parecía de la época de antes de cristo, todo duro, seco e insulso. Las camareras igual que la dueña, Dios los cría, entre ellos se juntan. Luego no hablemos de la habitación, el colchón quemado, probablemente con más años que Jesucristo, la ventanas no estaban bien aisladas y entraba frío de noche. La calefacción no funcionaba y la televisión pedía ya la eutanasia. Más tarde, por la tarde, una recepcionista rubia de bote se puso borde con nosotros porque estábamos pidiendo mucho en el bar, ¿Entonces para qué ofrecéis el servicio si quiera? La mujer tenía una voz horrorosa de fumar mucho tabaco, además que ella misma olía fatal. A nuestra partida del hotel, la dueña nos intentó cachear para ver si nos llevábamos algo del hotel, un descaro total. Definitivamente, a este sitio no volvemos jamás, una dueña sinvergüenza, una recepcionista impresentable y un pésimo servicio. Ni si quiera sé por qué permiten que este tipo de sitios estén abiertos. ????

Estuvo mi hija alojada con el instituto hace unos días.
Por dónde empezar…
Comida de mala calidad, butifarra, pizza, quiche, macarrones pastosos, hamburguesa y croissants del desayuno secos y ya me parece el colmo, que en una ocasión no había postre para todas las mesas! Todo ultraprocesado, ni siquiera una sola pieza de fruta.
En la pared del lavabo había un agujero, humedad en el techo Justo encima de la bañera.
Las camareras deberían de aprender un poco más de educación.
Quitar un trozo de pan a un niño mientras se lo está comiendo, me parece lamentable. Pero claro, a un adulto no tenemos suficiente valor para hacerlo.

Y como no, varios compañeros han continuado con la”tradición “de ponerse enfermos del estómago.

Lo único positivo que puedo decir, es que está cerca del centro andando.

Por trabajo duermo bastante en hoteles y solo puedo decir, huid!

NO vengáis a este ‘hotel’ si no queréis arruinar vuestra experiencia en Andorra. Habitaciones incómodisimas, pedimos una doble con cama de matrimonio y cuando llegamos nos habían dado una habitación de 4 camas individuales, como un chiquipark. Muchísimo ruido de noche, sin poder dormir. Nada de equipación en la habitación, en la TV solo funcionaba 1 canal. Para aparcar, incluso pagando, 1h dando vueltas. Fatal ubicado. Pagamos cena… en qué momento… cuando llegamos ni nos presentaron opción. De repente vemos aparecer una persona con una bandeja de metal con queso chorreando y un pegote de macarrones que nos empezó a poner sin preguntar. De Segundo, sin opción de elegir obviamente, un trozo de carne rebozada en aceite. Si llego a saber que estoy pagando por eso, hubiera preferido pagar más y comer bien. El desayuno… un trozo de pan de 1998 y un par de productos ultra procesados envasados. Ni fruta, ni nada un poco saludable, y la maquina de café ni funcionaba. Me siento súper estafada, parece un albergue. Muy decepcionante.

Una experiencia desastrosa la vivida en el Hotel Jaume I. Incluimos la cena en nuestra noche y al llegar nos encontramos con unos “macarrones boloñesa” como plato principal y UNA chuleta de cerdo rebozada en la que había más aceite que chuleta. Lo lógico bajo nuestro punto de vista, es que si se ofrece el servicio de cena, te dignes a informar al cliente previamente de que se ofrecerá un único primero y un único segundo y si a esto le añadierais el aviso de que la comida es de una calidad/elaboración lamentable, seguramente nadie reservaría dicho servicio. Reservamos una habitación para dos y nos encontramos al llegar a la habitación 4 camas individuales, os podéis imaginar la sensación de vamos metiendo a la gente donde quepa que tuvimos. Y si hablamos del desayuno….. ponemos la guinda del pastel. 4 trozos de pan duro, un pegote de “nocilla” tirado en un plato que parecía masilla de la obra y un jamón dulce que parecía que lo había vomitado un perro. Ah eso si, la gran variedad de canales de los que dispone la TV es abrumador, un único canal para uso y disfrute del público (Antena 3). En definitiva una de las peores experiencias vividas en un hotel.
Pd: Os recomiendo venir en helicóptero que seguramente encontréis más sitios que los que ofrecen los alrededores del hotel para los coches.

Ha estado mi hijo con el instituto y a sido una decepción de hotel, tanto las instalaciones que incluso no tenían agua caliente en alguna de las habitaciones como la comida que era de pésima calidad, de echo han llegado casi todos malos del estómago, y ni que decir tiene lo bordes que han sido con los chavales, está contrato con Estiber que evidentemente tendrán un mala valoración y constancia de este hotel con el fin de que busquen mejores opciones.

Es un buen hotel calidad precio, y la recepcionista muy maja.

Són els millors!

En las colchas de las camas había quemones de cigarro. En el comedor los manteles estaban manchados de comida de otros comensales cuando nos sentábamos a comer. La comida no tiene buena calidad. A la hora de estar en la habitación se escucha todo lo que hablan fuera.

Horrorós. Ens van donar una habitació doble amb les tvs trencades, i al canviar-nos, un llit estava trencat i l'habitació pudia a fum i la calefacció era insuportable. A més, l'esmorzar dolentíssim: menjar processat i barato i ni una peça de fruita...

Estancia muy agradable, la habitación y el hotel en general muy limpio, si que es cierto que puede necesitar una reforma mobiliario, habitaciones… pero calidad precio esta muy bien, desayuno correcto, tienes tortilla, salchichas cereales, tostadas, huevos… y la ubicación para aparcar no es mala, buscando se encuentra aparcamiento en la calle.

Super établissement personnel très accueillants

Espaçoso, agradável, recepção nota 10, parabéns.

Reservamos este sitio a través de la agencia de viajes Estiber, y no entiendo la poca vergüenza que tienen de vender semejante cosa (que no se le puede llamar ni hotel) en su página web. Nada más subir en el ascensor nos impacto el fuerte olor a maria que hacía, olor que se notaba también en los pasillos a todas horas. Mi hijo no paraba de preguntar a que olía. Las paredes de las habitaciones sucias, las colchas totalmente impresentables. El desayuno un horror. No lo recomiendo para nada.
Las autoridades competentes deberían de tomar nota.

Estimado equipo del Hotel Jaume I,

Me pongo en contacto con ustedes para expresar mi profunda frustración y decepción con la gestión de un asunto ocurrido durante mi reciente estancia en su hotel.

Olvidé una camiseta de manga corta de Max Mara en mi habitación 401, la cual tiene un gran valor emocional para mí. Después de varias llamadas, me aseguraron que la habían encontrado y acordamos que pasaría a recogerla alrededor de las 16h.

Sin embargo, al llegar para recogerla, la situación se complicó. La persona encargada no pudo encontrar la llave donde se suponía que la habían guardado las señoras de la limpieza y no habia ningun responsable para solucionar esto. Esta falta de coordinación y eficiencia ha resultado en una pérdida considerable de mi tiempo por la espera y ha generado una gran insatisfaccion.

Dado que me encuentro fuera de Andorra, la opción de regresar al hotel al día siguiente no era práctica para mí. Por lo tanto, solicito encarecidamente que envíen la camiseta a mi domicilio lo antes posible, como hemos acordado.

.Aprecio su pronta atención a este asunto y confío en que podamos resolverlo de manera satisfactoria.

Agradezco su comprensión y cooperación.

Atentamente,

Alba Jimenez

El hotel es bien viejo, los colchones muy muy pasados y llenos de muelles. El desayuno es de calidad bastante baja, como han escrito otros usuarios. No tienen aguas para vender (me dijo la recepcionista que el agua del grifo está buena, terrible). No ofrecen el parking y todo consejo es muy aproximado.
Hubiera omitido estos detalles si no fuera por la terrible gestión de la calefacción. Había tres radiadores en la habitación, los tres encendidos al máximo de 20 a 8 de la mañana, con los tubos exteriores y una calor impresionante, el aire superviciado y ninguna posibilidad de apagarlos. Hemos dormido fatal todos y yo me he enfermado de la garganta. Cuando lo comenté en recepción me explicaron que otros clientes quieren mucho calor y que no se puede apagar. He tenido que empapar unas toallas y ponerlas encima de los radiadores para poder respirar, Invito quien se ocupa de esto a echar un simple vistazo en Google sobre la calefacción por la noche, quizás pueda aprender algo "nuevo".

Es un detalle que nos ha en parte estropeado las vacaciones, así que si sois gente "normal", fijaos bien antes de ir.

Hotel con encanto, mal conservado.

Este hotel se encuentra a 30 minutos a pie de la zona comercial de Andorra.
El parking es complicado por la zona, pero hay uno cerca de pago, por el que cobran 16 euros por dejar el coche por la noche.
El Hotel tiene aparcamiento pero no quedaban plazas cuando estuvimos nosotros y además, se pagaba a parte.
Esto último lo comento, por qué estaría bien dar esa información a los clientes antes de llegar a la recepción, puesto que después es molesto buscarte la vida por los alrededores.

La habitación era muy normal, bastante vieja.
Hace tiempo que no hacen reformas porque está lleno de grietas por todas las paredes y techos.
Las sábanas tenían agujeros y parecían haber pasado un par de guerras.
El baño no tenía apenas nada, y si querías un secador de pelo, tenias que ir a pedirlo a la recepción.

El personal de recepción fue correcto, pero no muy simpáticos.

En cuanto al comedor, teníamos el desayuno incluido y la calidad fue muy mala.
El café no se podía beber y la comida era malísima. Hicimos los desayunos fuera a pesar de poder haberlos hecho ahí.

Para finalizar, quisiera comentar que en la planta que estuvimos alojados (Planta 2), olía muchísimo a tabaco, cosa muy molesta por la mañana, recién despertado, mezclada con el olor a cerrado y humedad de la misma planta.

Si volvemos a Andorra, buscaremos nuevas opciones. No lo recomiendo.

Buena ubicación, edificio e instalación algo antigua pero en general todo bien. El desayuno no lo recomiendo poca variedad y mala calidad.

Ana, un encanto.